Postura surge en respuesta a Donald Trump, quien había hablado de la “absoluta necesidad” de adquirir la isla.
El primer ministro de Groenlandia, Múte Egede, ha dejado claro que su país no tiene intención de convertirse en parte de Estados Unidos.
En sus declaraciones, destacó que Groenlandia busca fortalecer sus relaciones con Washington, especialmente en las áreas de seguridad y exploración de recursos naturales. La posición de Egede llega en respuesta a los comentarios del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quien había hablado de la “absoluta necesidad” de adquirir Groenlandia.
El primer ministro expresó su sorpresa ante la posibilidad de utilizar la fuerza y afirmó que Groenlandia no quiere ser estadounidense.
A pesar de su rechazo a la idea de compra, Egede expresó interés en una colaboración más estrecha con Estados Unidos. Destacó la importancia de las alianzas en defensa y minería, áreas que pueden beneficiar a ambos países. El Primer Ministro destacó que, aunque no buscan la anexión, están abiertos a diálogos que promuevan el desarrollo conjunto y la seguridad regional.
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