Nacional
Diputada Marlene Pérez califica de “insólita” solicitud del Ejecutivo a gobiernos regionales para traspasar recursos a Servicios de Salud

“El que maneja el 6% de la región debe prestarle plata al que maneja el 94% del presupuesto”, cuestionó.
La parlamentaria por la región del Biobío, Marlene Pérez expresó su firme rechazo ante la reciente petición del Ejecutivo de solicitar traspasos de recursos desde los gobiernos regionales a los Servicios de Salud, destinados a financiar gastos en bienes y servicios de consumo. La parlamentaria calificó esta acción como “insólita”, argumentando que se trata de una irresponsabilidad por parte del Ejecutivo, que debería asumir su responsabilidad en la gestión de los recursos destinados a la salud pública.
La diputada Pérez afirmó que el Ejecutivo ha mal administrado los recursos y ahora, ante la falta de financiamiento, pretende trasladar la carga económica a los gobiernos locales.
“Por qué el que maneja el 6% de la región debe prestarle plata al que maneja el 94% del presupuesto. El Gobernador asume el día 6 de enero y el día 10 de enero ya le habían quitado $100.000.000.000 y ahora a cuatro meses de haber asumido quiere que le financien la operación de los hospitales”, cuestionó la parlamentaria.
Tras esto, Pérez afirmó que “lo contradictorio es que el Gobierno saca una glosa de Salud que dice que los Gore pueden financiar la operación. Y al mismo tiempo la glosa número 3 del Gobierno Regional dice que se prohíbe financiar operación“.
Pérez subrayó que la descentralización no puede ser utilizada como una excusa para desviar responsabilidades. “Es fundamental que el gobierno asuma su rol en la garantía del acceso a medicamentos e insumos necesarios para el funcionamiento adecuado de los Servicios de Salud. Los recursos deben ser gestionados con transparencia y eficacia, asegurando que lleguen donde más se necesitan, sin trasladar esa carga a los gobiernos regionales,” enfatizó la parlamentaria.
Ante la continuidad de la crisis en el sector salud, la diputada Pérez expresó que “la situación actual requiere respuestas ágiles y efectivas que prioricen el bienestar de la ciudadanía, y no más desviaciones o excusas que perpetúen problemas históricos en la administración de la salud pública”.