Gafas de sol: ¿Qué características debe tener el modelo adecuado para proteger los ojos?

La elección de gafas de sol certificadas es clave para prevenir problemas como cataratas, degeneración macular o quemaduras en la córnea.

El verano trae consigo más horas de exposición al sol, lo que hace que el uso de gafas de sol sea esencial para proteger los ojos de los dañinos rayos ultravioleta (UV) que pueden provocar diversas afecciones.

Entre los daños que provocan los rayos UV en los ojos, Yessica Ramírez, tecnóloga médica en mención Oftalmología y académica de la Facultad de Medicina UCSC, explicó que “dentro de las afecciones más comunes relacionadas por la radiación encontramos la pterigión y la pinguécula, condiciones que se caracterizan por la proliferación anormal de tejido en la membrana transparente que cubre la parte blanca del ojo”.

“Si expone los ojos a un exceso de luz solar y rayos UV durante un período breve, se podría desarrollar una especie de quemadura ocular en la córnea llamada queratitis, también hay un aumento del riesgo de padecer cataratas, enfermedades en la retina como la degeneración macular, así como cáncer en los párpados y la piel alrededor de los ojos”, enfatizó la profesional.

El uso de lentes de sol con filtro UV ayuda a prevenir afecciones como cataratas, lesiones en la retina, incluida la degeneración macular; crecimientos anómalos de tejido sobre la córnea, como el pterigión; queratitis o conjuntivitis causadas por la exposición temporal a los rayos UV, así como cáncer en los párpados y la piel circundante.

Bajo ese contexto, es importante utilizar lentes de sol con protección UV en lugar de modelos decorativos. Ramírez comentó que “hay anteojos que son diseñados para estética, en el mercado existen lentes de muy mala calidad que, si bien pueden absorber cierto porcentaje de radiación UV, no es suficiente para entregar la protección adecuada a nuestros ojos porque a veces no tienen la suficiente calidad óptica y distorsionan la visión).

“Al tratarse de lentes oscuros pueden generar más dilatación de las pupilas, permitiendo la entrada de más radiación dañina. Mientras que, los lentes con protección UV bloquean el 99-100% de los rayos UVA y UVB, que son el tipo de radiación que pueden dañar nuestros ojos”, resaltó la tecnóloga médica.

Al momento de comprar unos lentes de sol que garanticen una buena protección ocular, la profesional recomendó que “estos deben tener protección UV que esté certificada con etiquetas que digan ‘UV400’ o ‘100% protección UV’, que son filtros que protegen nuestros ojos casi en un 100% de los rayos UV”.

Un error común al elegir gafas de sol es pensar que los lentes más oscuros ofrecen mayor protección contra los rayos UV. Sin embargo, la experta advirtió que “el color de los lentes no garantiza seguridad. Los lentes de sol más oscuros no siempre ofrecen mayor protección contra los rayos UV, no hay que dejarse engañar por el color, solo los lentes con 100% protección UV, brindan la seguridad que se necesita”.

“En el mismo caso sucede con los lentes polarizados que reducen el resplandor que rebota de superficies como el aguanieve y carreteras, pero la polarización por sí sola no proporciona protección UV, se debe consultar la etiqueta de los lentes para asegurarse que además brindan protección contra la radiación”, subrayó Ramírez.

La experta en salud visual indicó que “hay que optar por lentes de sol con cobertura amplia, como modelos de diseño envolvente o con lentes grandes. Este tipo de gafas no solo protegen los ojos de los dañinos rayos ultravioleta (UV), sino también la piel circundante, reduciendo el riesgo de daños como quemaduras solares, envejecimiento prematuro y cáncer de piel en el área ocular”.

En relación al precio de estos lentes, la académica de la UCSC, señaló que “esto no tiene relación con su protección, los lentes no tienen por qué ser más caros para ser seguros y eficaces, independiente de su marca o diseño, lo importante es que contenga lo anteriormente mencionado, porque no todos los modelos económicos garantizan la protección UV, pero hay otros que sí cumplen los estándares básicos”.

“Siempre hay que revisar la etiqueta para confirmar que ofrecen protección adecuada y realizar la compra en tiendas confiables, evitando productos de origen dudoso que puedan poner en riesgo la salud visual”, reiteró la tecnóloga médica.

¿Es necesario usarlos todos los días?

El uso de lentes de sol no debe limitarse al verano, porque la radiación UV está presente en todas las estaciones, incluso en días nublados, ya que las nubes no bloquean estos rayos dañinos. Además, superficies como la nieve, la arena y el agua reflejan la radiación, intensificando su impacto en los ojos.

La especialista indicó que “es muy importante proteger los ojos del sol mientras se trabaja al aire libre o si participa en actividades recreativas como navegación, esquí, ciclismo, golf, tenis, entre otras. La nieve recién caída puede reflejar hasta el 80% de los rayos UV, mientras que el suelo normal refleja menos del 10%, la arena de las playas refleja entre el 15% y el 25% de los rayos UV”.

“Las personas de todas las edades deben tomar precauciones al estar al aire libre, en especial a los que tienen ojos claros, que son más sensibles a la radiación UV, al igual que los trabajadores que realizan actividades al aire libre y los deportistas, debido a que tienen constante exposición al sol”, cerró Ramírez.