Con un show lleno de música, humor y guiños culturales.
Por Javiera Briones Ortega.
La icónica banda chilena de títeres 31 Minutos protagonizó este lunes un concierto inédito en el ciclo Tiny Desk de la radio pública estadounidense NPR, marcando la primera vez que un grupo de títeres participa en este reconocido formato musical. La sesión, realizada en el marco del Mes de la Herencia Hispana en Estados Unidos, combinó música, sátira y crítica social en un espacio reducido frente a un escritorio, característico de la serie que busca ofrecer una experiencia musical cruda y sin filtros.
El elenco, liderado por Tulio Triviño, presentó siete canciones en poco más de 21 minutos, incluyendo temas emblemáticos como “Mi equilibrio espiritual”, “Objeción Denegada”, “Bailan sin César” y “Mi muñeca me habló”. Con su característico humor, los personajes ironizaron sobre la política antiinmigración de Donald Trump y las dificultades migratorias que afectan a la comunidad latina, mientras guiños culturales y referencias televisivas, como Better Call Saul, se mezclaron con homenajes al rock chileno de los ochenta, cerrando con La voz de los 80 en homenaje a Los Prisioneros.
El miniconcierto también destacó por su escenografía y vestuario: los títeres y músicos se integraron al fondo austero de los estudios de NPR, mientras el pianista usaba una camiseta que simulaba ser el piano, manteniendo toda la atención en los personajes y la narrativa del espectáculo. Uno de los momentos más comentados fue la aparición de Cocodrilo, un personaje que fungió como “agente encargado de llevar sanos y salvos a casa” a los protagonistas, reforzando el tono político con humor y sarcasmo.
Con este debut, 31 Minutos se suma a artistas chilenos como Mon Laferte, Ana Tijoux y Rubio, dejando su sello único de ironía, crítica y calidad musical en el prestigioso ciclo Tiny Desk. El concierto ya acumula cerca de medio millón de reproducciones en pocas horas, reafirmando el impacto global de este proyecto que combina entretenimiento infantil con guiños para adultos y una mirada crítica de la realidad social.
El cierre mantuvo la ironía: mientras el “cocodrilo MAGA” reaparecía, Tulio Triviño se despidió con su habitual humor: “Eso ha sido 31 Minutos. Fue un placer, un honor, y… ¡ya nos vamos al avión!”.
Mira acá el programa completo:
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