Papa León XIV afirma que Jesús es el Único Salvador de la Humanidad
Según el decreto, la Iglesia reconoce que María «colaboró» en la obra redentora de Cristo, pero no actuó como mediadora.
El Vaticano instruyó a los católicos de todo el mundo a no referirse a María como «corredentriz», en una nueva instrucción aprobada por el Papa León XIV. Según el decreto, la Iglesia reconoce que María «cooperó» en la obra redentora de Cristo, pero no actuó como mediadora.
«Considerando la necesidad de explicar el papel subordinado de María a Cristo en la obra de la Redención, el uso del título de Corredentora para definir su cooperación es siempre inapropiado», afirma el texto.
El decreto señala que el título de «corredentriz» conlleva el riesgo de «oscurecer la singular mediación salvífica de Cristo», lo que podría causar «confusión y desequilibrio en la armonía de las verdades de la fe cristiana». «No hay salvación en ningún otro, porque no hay otro nombre bajo el cielo dado a los hombres que pueda salvarnos», añade el texto.
«No conviene exaltar a María como la primera y más grande colaboradora en la obra de la Redención y la gracia, porque el peligro de oscurecer el lugar exclusivo de Jesucristo, el Hijo de Dios hecho hombre para nuestra salvación, el único capaz de ofrecer al Padre un sacrificio de valor infinito, no sería un verdadero honor para la Madre».
El texto también cita momentos en los que el Papa Francisco expresó su oposición al título de «Corredentora», afirmando que María «nunca quiso apropiarse de nada de su Hijo».
«Nuestra Señora no quiso quitarle ningún título a Jesús. No pidió ser una cuasi-redentora ni una corredentora: no. El Redentor es uno y este título no se duplica. Cristo es el único Redentor: no hay corredentores con Cristo». «Porque el sacrificio de la Cruz, ofrecido con un corazón amoroso y obediente, presenta una satisfacción superabundante e infinita», afirmó el Papa Francisco en 2020.
El documento publicado este martes también examinó otros títulos marianos (relacionados con María), como «mediadora». Según el texto, el término solo puede usarse en un sentido subordinado a la acción de Cristo, y no en el sentido de que María sea distribuidora de gracias. Títulos como «Madre de los fieles», «Madre de la Iglesia» y «Madre de la gracia» fueron aprobados, pero siempre con la salvedad de que conducen al Hijo.
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