Venezuela arresta a ciudadanos de EE.UU., España y República Checa por presunta conspiración contra Maduro

España, al igual que Estados Unidos, negó cualquier participación en una operación.

Los gobiernos de Estados Unidos, España y República Checa buscan aclaraciones de Venezuela sobre la detención de sus ciudadanos, quienes fueron arrestados bajo acusaciones de estar involucrados en una supuesta conspiración contra el presidente Nicolás Maduro. La información sobre las detenciones fue dada a conocer por el ministro del Interior, Diosdado Cabello, quien confirmó que entre los detenidos se encuentran dos españoles, tres estadounidenses y un checo, todos con visas de turista.

El presidente Maduro declaró que los detenidos confesaron su participación en el crimen y se mostró irónico al llamarlos “turistas terroristas”. En respuesta, el Ministerio de Asuntos Exteriores español solicitó información oficial sobre los dos ciudadanos españoles y está en diálogo con las autoridades venezolanas. La República Checa también se pronunció pidiendo detalles sobre la situación.

Estados Unidos, por su parte, negó cualquier implicación en la supuesta conspiración y está siguiendo de cerca la evolución del caso. Los detenidos fueron identificados como José María Basoa y Andrés Martínez Adasme, de España, Jan Darmovrzal, de República Checa, y los estadounidenses Estrella David, Aaron Barren Logan y Wilbert Josep Castañeda. El gobierno venezolano afirmó que se incautaron más de 400 fusiles que estaban destinados a “actos terroristas”.
España rechazó cualquier participación en una operación de desestabilización política en Venezuela. Las detenciones se produjeron en un contexto de creciente tensión entre Caracas y los gobiernos de Estados Unidos y España, especialmente después de las elecciones del 28 de julio, que resultaron en la reelección de Maduro, proceso que generó polémica y llevó al gobierno estadounidense a imponer sanciones a 16 empleados del chavismo.

La relación entre Madrid y Caracas se deterioró aún más con la llegada del opositor Edmundo González Urrutia a España, donde pidió asilo. El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, recibió a González y el Parlamento español aprobó una resolución solicitando que el gobierno reconociera al opositor como ganador de las elecciones.
En respuesta a estos hechos, Venezuela llamó a su embajador en Madrid y expresó protestas contra las críticas a la reelección de Maduro.