Internacional
Ecuador demanda a México ante la Corte Internacional de Justicia por conceder asilo a la exvicepresidenta Glas
La acusación de hacer “uso flagrantemente abusivo de las instalaciones de una misión diplomática”.
Ecuador demandó este lunes (29) a México por conceder asilo al exvicepresidente Jorge Glas, investigado por corrupción y en el centro de una tormenta diplomática tras su captura en el interior de la embajada de México en Quito.
Los ecuatorianos acudieron a la Corte Internacional de Justicia (CIJ). Ecuador se sumó a su homólogo y señaló, este lunes, ante el máximo tribunal de la ONU (Naciones Unidas), “las violaciones por parte de México de una serie de obligaciones internacionales, por la conducta del país desde el 17 de diciembre de 2023”, cuando Glas se refugió en la legación bajo estatus de asilo, dijo el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado.
Según un comunicado de la CIJ, Ecuador acusa a México de hacer “un uso flagrantemente abusivo de las instalaciones de una misión diplomática” para proteger a Glas.
Quito considera “ilegal” el asilo, alegando que el exvicepresidente (2013-2017) está siendo investigado por malversación de fondos públicos y que tiene dos condenas por corrupción. Este proceso llega casi un mes después de que el ataque a la representación diplomática el pasado 5 de abril por parte de policías ecuatorianos llevara a México a romper relaciones con Ecuador y presentar primero una denuncia ante la CIJ que comenzará a conocerse a partir de este martes. México, por su parte, denunció que este acto violó la Convención de Viena y sostiene que es el país que otorga asilo el responsable de determinar si es apto o no.
Tras el ataque, México solicitó a la CIJ suspender la membresía de Ecuador en la ONU hasta que las autoridades de ese país emitan una disculpa pública.
Glas fue condenado en 2020 por uno de los casos de soborno, junto al expresidente socialista Rafael Correa (2007-2017), del que fue vicepresidente.
El exvicepresidente fue condenado a ocho años de prisión, pero solo cumplió cinco y quedó en libertad en 2022 tras una cuestionada medida cautelar. Su libertad estuvo condicionada a comparecencia periódica ante una autoridad judicial. La ayuda otorgada a Glas viola las convenciones de asilo diplomático y los acuerdos anticorrupción, según el gobierno ecuatoriano.