Mes de lucha contra la obesidad: 3 de cada 4 adultos con sobrepeso

Las cifras son alarmantes desde la infancia a la adultez y los días de pandemia agravaron la poca generación de hábitos. ¿Dónde hay que atacar el problema? ¿Se han tomado las medidas necesarias? ¿Qué falta por hacer?

Es un problema detectado hace largo rato, pero aún así no se le encuentra freno. El sobrepeso y obesidad es “la otra pandemia”, que hace años viene subiendo sus cifras a nivel mundial y Chile es uno de los diez países con peores índices en el mundo. Sí, 3 de 4 adultos en nuestro país sufren sobrepeso, o bien, obesidad. En el Bío Bío, el número se dispara a un alarmante 78 por ciento. ¿Y los niños? A los 6 años, la mitad ya tiene sobrepeso y un alarmante 24,7 por ciento padece obesidad.

El profesor Hugo San Cristóbal trabaja en el básquetbol infantil y expresó que “una de las principales causas de este problema es la baja participación en la actividad física y eso es tanto en adultos como en los niños. Hay muchos factores, como el sedentarismo, exceso de trabajo, problemas y otros que frenan a que el adulto haga ejercicio. El mismo ritmo de trabajo lleva a la comida rápida y los niños siguen la alimentación de sus papás. Los niños no ven a sus papás hacer deporte, no hay ejemplo, y terminan pegados en su celular. También hubo dos años de pandemia que no supimos manejar correctamente y donde mucha gente no hizo nada encerrada”.

El profesional del Lord Cochrane agregó que “se han intentado ciertas medidas a nivel global, planes de trabajo, pero no han sido efectivas. La gente tampoco las ha tomado demasiado en cuenta. Cualquier medida para mejorar este tema es a largo plazo y no se verán resultados inmediatos. Fundamental es aumentar las horas de Educación Física, crear hábitos desde pequeños, aumentar los talleres deportivos y darle más difusión al problema y a qué se está haciendo”.

Por último, señaló que “la obesidad es el comienzo de una enfermedad y de muchas otras. La hipertensión, diabetes, problemas al corazón. Hay que reaccionar a ese problema, pero también ser preventivos, que los papás se den un tiempo para sacar a los niños a correr, jugar, andar en bicicleta. Cosas simples que marcan la diferencia de una vida”.

Constanza Ruiz, preparadora física de My Time Fitness, explicó que “el sobrepeso y obesidad son distintos grados de exceso de peso corporal que conlleva un aumento de grasa, por un desbalance entre el consumo y gasto de energía . ¿Por qué llevamos tanto tiempo en índices altos de obesidad? Son varios factores: mal y excesivo uso de la tecnología, la que promueve el sedentarismo, tenemos distractores más potentes que nos limitan a salir de nuestro metro cuadrado, estando sentados en un sillón por horas. Poco acceso  a productos frescos  por falta de tiempo y costo, aumentando la ingesta de alimentos procesados los cuales tienen mayor densidad energética”.

Entre estos factores también agrega “demasiada carga laboral y de estudio, que demanda mucho tiempo, estrés y cansancio. No es la excusa para no hacer ejercicio físico y sí podemos romper con este mal hábito, pero es una limitante para el mayor porcentaje de la población, el cansancio limita el querer moverse”.

Sobre qué se ha hecho para frenar este drama a nivel país, “Coni” indica que “a nivel de Estado las medidas han sido insuficientes en cuanto a educación y prevención en las etapas donde se debería tener más conciencia, que es durante el periodo estudiantil y educación primaria. Me encanta la idea de incorporar la nutrición, conciencia emocional y corporal junto a la educación física, que exista una mirada más integral del tema”.

También se avanza para integrar la obesidad como una enfermedad ya reconocida y tomada en serio.

Constanza precisó que “por un lado, en la obesidad coexisten los componentes de una enfermedad primaria y un factor de riesgo. Es imprescindible identificarla como enfermedad para determinar diagnóstico y tratamiento, promoción y prevención. Aquí entra en juego la importancia de enfatizar la incorporación de hábitos saludables desde niño, tanto de alimentación como ejercicio, manejo emocional y conciencia corporal. Es tan importante la prevención como el considerarlo una enfermedad, que sea tomado con tratamiento, porque tiene síntomas clarísimos”.

Fuente: Diario Concepción